Se está realizando en Francia un juicio por corrupción contra el presidente de la Federación Francesa de Rugby y Mohed Altrad.

La fiscalía nacional financiera de Francia pidió al Tribunal Penal de París tres años de prisión contra Bernard Laporte, presidente de la Federación Francesa de Rugby (FFR) y el empresario Mohed Altrad.

El dirigente de la FFR está acusado de corrupción pasiva, tráfico pasivo de influencias, apropiación ilegal de intereses, abuso de confianza y encubrimiento de abuso de activos corporativos, entre otros cargos. Por estas acusaciones la fiscalía también solicito para Laporte la prohibición para ejercer cargo en cualquier función ligada al rugby.

En tanto, al empresario Mohed Altrad, se lo acusa de tráfico de influencias, corrupción activa y abuso de los bienes de la empresa constructora que lleva su nombre.

El fiscal financiero François-Xavier Dulin afirmó que ambos “han dañado la moral y honradez que rodea al rugby francés” al señalar que el presidente de la FFR habría beneficiado al grupo Altrad con el que había establecido un contrato de imagen (de la selección nacional francesa) en secreto y que supuso el pago “a título gratuito de 180.000 euros a principios de 2017

Además, el fiscal señaló que el jefe del rugby francés llevó a cabo “intervenciones atípicas y problemáticas” en beneficio de los intereses del Sr. Altrad, su grupo del que forma parte el Montpellier rugby club (MHR), del cual él es el presidente. “Bernard Laporte estaba cegado por sus intereses privados dentro del grupo Altrad“, agregó Dulin.

Por su parte, la otra fiscal del caso, Céline Guillet, señaló que aquel acuerdo fue el “pecado original“, y afirmó que las “condiciones de negociación son oscuras” y sostiene que la remuneración es “inusual”.

Las acusaciones

  • Según lo expuesto por los fiscales franceses, en junio de 2017, Laporte junto a la comisión de apelación de la FFR, quienes también están imputados, decidieron “aliviar” distintas sanciones disciplinarias impuestas al club Montpellier. Para el fiscal se violaron los “principios del deporte”.
  • La otra parte de la acusación se centra en las condiciones para la concesión del patrocinio de la camiseta del XV de Francia al grupo Altrad, por 6,8 millones de euros anuales. Aquí los fiscales sostienen que no hubo “un procedimiento imparcial, “el código de ética (de la FFR) no era el libro de cabecera del señor Laporte”, lanzó la fiscal Guillet.

La condena solicitada:

Tanto Dulin, como la Señora Guillet, solicitaron a los jueces las siguientes penas:

Para Bernard Laporte: 3 años de prisión (dos en suspenso), multa de 50.000 euros y la inhabilitación para ejercer funciones que tengan que ver con el rugby durante dos años.

Para Mohed Altrad: 3 años de prisión (dos en suspenso, multa de 200.000 euros, la inhabilitación para dirigir una empresa comercial durante dos años y la inhabilitación para ejercer funciones que tengan que ver con el rugby durante dos años.

Para Claude Atcher (ex director del comité organizador de la RWC 2023): 2 años de prisión (uno en suspenso), multa de 50.000 euros.