Con Moroni y Montoya Tigers ganó la final ante Saracens y se quedó con el título de la Premiership.

Gracias a un drop de Freddie Buns Leicester Tigers derrotó a Saracens 15 a 12 y se coronó Campeón de la Premeirship tras 9 años sin poder conseguirlo.

Para esta nueva proeza, Los Sarries contaron con Matías Moroni y Julián Montoya, ambos formaron parte de los XV que saltaron al campo de juego desde el minuto cero.